Técnicos de Brasil hallaron el viernes, en la desembocadura del río Amazonas, una ballena de diez toneladas y once metros de largo. El animal, encontrado sin vida y cubierto de vegetación, estaba ubicado a 15 metros de la línea costera.
Hace cuatro días, los Técnicos de la Secretaría Municipal de Salud, Saneamiento y Medio Ambiente de Pará (Brasil) se toparon con un descubrimiento inusual. Cubierta de vegetación y a casi 15 metros de distancia del mar, los funcionarios hallaron una ballena jorobada sin vida. El ejemplar, que pesó diez toneladas y midió once metros de largo, fue encontrado en la localidad de Soure, en la isla de Marajó (en la desembocadura del río Amazonas). (Lea: Por primera vez observan a cangrejos alimentarse de fugas de metano en el fondo del mar)
El misterio del paradero del animal, también llamado yubarta o Megaptera novaeangliae en términos científicos, radica en cómo esta ballena de semejante peso pudo haber llegado hasta tal área, en medio de la selva amazónica. Para resolver esa incógnita, los expertos tienen un par de teorías que no termina de convencerlos.
Una de ellas sugiere que la ballena falleció en el mar y luego, su cadaver pudo haber flotado hasta la zona boscosa en donde fue encontrada. Esta teoría, acompañada de mares agitados y altas mareas que la hayan arrojado tierra adentro, es una de las más aceptadas. Otros aseguran que el individuo, que se estima como una cría de doce meses, tuvo que haberse enredado en los manglares del Amazonas para después ser arrojada a tierra gracias a las olas altas.
Aunque no haya aún una hipótesis aceptada, el diario The Maritime Herald sugirió que la muerte de la ballena pudo haber sido provocada por ingesta de plásticos. No obstante, los científicos no coinciden con una explicación del paradero del animal.
Foto: Este ejemplar, que pesó diez toneladas y midió once metros de largo, fue encontrado en la localidad de Soure, en la isla de Marajó (en la desembocadura del río Amazonas).