Un informe publicado por la organización MAAP dice que hubo 156.722 hectáreas taladas en la Amazonía colombiana en 2018. Aunque el IDEAM no ha publicado las cifras para 2018, algunos piensan que la cifra está subdimensionada. Meta, Guaviare y el Parque Chibiriquete preocupan.
La semana pasada, el programa MonitorinG of the Andean Amazon (MAAP), una organización que usa información satelital para monitorear la deforestación en tiempo real, publicó unas preocupantes conclusiones de la mano de organizaciones como Amazon Conservation y el Amazon Conservation team: en 2018, se talaron 156.722 hectáreas en la mazonía colombiana.
El informe del MAAP se adelantó al del IDEAM, que cada año publica una cifra que recoge toda la información del año. Aún no ha publicado la cifra de deforestación de 2018, pero para 2017, el IDEAM determinó que la deforestación alcanzó las 214.744 hectáreas en todo el país, de las cuales 144.147 cayeron en la Amazonía colombiana. En particular en el Guaviare, Caquetá y Sur del Meta.
“Si se confirma esta estimación, sería la segunda cifra más alta registrada (solo detrás de 2017). Las imágenes satelitales indican que los principales impulsores directos de la deforestación son la agricultura y la ganadería (pequeña y mediana escala). Las fuentes locales indican que el aumento del acaparamiento de tierras es el principal impulsor indirecto principal de la reciente oleada”, explica el comunicado de MAAP.
La cifra entregada, sin embargo, ha sido cuestionada. El ministro de Medio Ambiente, Ricardo Lozano, dijo en 2018 que la cifra de deforestación en Colombia podría alcanzar entre los 260.000 y 270.000 hectáreas al ritmo de tala actual, que parece no frenar.
Rodrigo Botero, director de la Fundación para la Conservación y el Desarrollo Sostenible, manifestó que la cifra estaba subdimensionada. “En septiembre pasamos las 150 mil. Y la interpretación está lejos de la realidad; no tiene datos de campo. El acaparamiento de tierras y el tamaño de lotes deben reconocerlo”. Según estimó para Semana Sostenible, puede ser que 2018 supere las 300.000 hectáreas, de las cuales cerca de 200.000 estarán en la Amazonia (el 70%).
Deforestación se viene dando en sectores norte y occidente en de Chiribiquete . NO es ganadería ni agricultura . Es importante consultar los datos y fuentes con información de terreno en Colombia . No se puede minimizar en cifras y análisis. @andesamazonfund @GADeforestacion https://t.co/lZcvRI3NBm
— Rodrigo Botero G (@RodrigoboteroG) 14 de febrero de 2019
Es realmente la cifra lo q importa? Q hay detrás de ese debate? @ecolmod hemos publicado artículos científicos al respecto, rigurosos, q incluyen hace años el tema de acaparacion de tierras (léanse!). Unos critican la técnica de los otros…mientras, la deforestación sigue. https://t.co/LLyjKlk5mQ
— Dr Dolors Armenteras (@darmenteras) 15 de febrero de 2019
“El principal motor de la deforestación en Colombia es el acaparamiento de tierras, responsable del 48% de la degradación de los bosques tropicales de la Amazonía y el Pacífico”, dijo el ministro en diciembre del año pasado en la Carrera contra la Deforestación que se celebró en San José del Guaviare, según cita Mongabay.
Al parecer, la diferencia de algoritmos en cada organización (Ideam y MAAPS) es parte de la diferencia entre las cifras, que según las proyecciones, podrían doblar a las de MAAPS para 2018.
Mientras los datos de deforestación del 2018 llegan, por lo general en abril o mayo, MAAPS identificó tres focos de deforestación en la Amazonía preocupantes, ubicados en el área de transición entre la Amazonía y los Andes: Caquetá, Guaviare y Meta, específicamente, Llanos del Yarí, Chiribiquete – La Macarena y el Parque Nacional Tinigua. Los tres han aparecido recurrentemente en las alertas tempranas del IDEAM.
Llanos del Yarí:
El mapa de MAAPS muestra la deforestación en expansión hacia el Parque Nacional Chiribiquete occidental. De hecho, en 2017-18 (púrpura y rosa en el mapa), la deforestación ha ocurrido dentro del parque.
Chibiriquete:
La joya de la corona de la conservación en Colombia peligra. El área entre los Parques Nacionales Chiribiquete y La Macarena está experimentando una de las oleadas de deforestación más intensas. La deforestación más reciente (indicada en rojo y rosa) está ingresando a la sección recientemente expandida del Parque Nacional Chiribiquete.
Parque Tinigua:
El tercer foco elegido por MAAPS es también uno de los frecuentes puntos de preocupación por parte del IDEAM. El Parque Tinigua perdió más de 5.000 hectáreas en 2018 por incendios forestales en los tres primeros meses del año. (La agonía del Tinigua)
(Todos los mapas fueron realizados por MAAP).
*Infoamazonia es una alianza periodística entre Amazon Conservation Team, Dejusticia y El Espectador.