Los grupos armados están ampliando sus operaciones en la Amazonia para explotar el tráfico y la minería, agravando la violencia y la deforestación en la región.
3 agosto 2023
La Amazonía, el bosque tropical más grande del mundo que comparten nueve países de Sudamérica, también es una selvática zona de tránsito de drogas y el lugar de donde se extraen ilegalmente recursos naturales.
A medida que las economías criminales se expanden por esta región, los niveles de violencia y la deforestación aumentan, mientras las comunidades que habitan allí enfrentan amenazas a sus formas de vida y a su propia existencia.
Bajo la frondosa capa del ecosistema más biodiverso del mundo yace una realidad más oscura, oculta detrás del esplendor de la naturaleza. Laberintos de miles de ríos permiten a los grupos criminales moverse libremente mientras la densa cobertura forestal evita que sean detectados por las autoridades.
La lejanía y la falta de infraestructura que caracterizan a esta región en todos los países generan una profunda desconexión entre las comunidades amazónicas y las ciudades capitales. Históricamente abandonadas por los gobiernos, regiones y poblaciones enteras quedan aisladas y excluidas.
En las fronteras, porosas y difíciles de controlar, convergen movimientos guerrilleros, grupos criminales y el crimen organizado multinacional.
Grupos armados, traficantes de drogas y mineros ilegales invaden y se apropian de áreas protegidas y de territorios indígenas. Incluso en algunos lugares, los guardabosques se ven amenazados y obligados a abandonar sus puestos de trabajo.
Algunas comunidades indígenas alquilan sus tierras para cultivos ilícitos o actividades de minería, y quienes se resisten a hacerlo se exponen a ser asesinados. A pesar de los esfuerzos por proteger la Amazonía y a los diversos pueblos indígenas que la habitan, los grupos criminales han tomado el control de regiones remotas. Este es Amazon Underworld (El submundo de la Amazonía), donde los ciclos de crimen y destrucción son alimentados por un comercio ilegal multimillonario de drogas, oro y armas.
GRUPOS CRIMINALES Y ARMADOS
Ciertos grupos criminales, como las guerrillas colombianas y la organización delictiva Família do Norte, con base en Manaus, tienen una larga historia de actividades en la Amazonía. Sin embargo, en los últimos años se ha registrado un notable aumento de la presencia de otros grupos criminales en la región.
Por la pandemia del covid-19, los países cerraron sus fronteras, pero las empresas criminales –que no conocen límites internacionales– aumentaron su control mientras los gobiernos limitaban sus acciones en la Amazonía.
Las zonas fronterizas remotas se han convertido en refugios donde estas redes interactúan, se dedican al comercio ilícito, alimentan conflictos, cruzan fronteras para evadir la aplicación de la ley y expanden sus economías ilegales.
La triple frontera que comparten Colombia y Perú (los dos mayores productores de cocaína del mundo) con Brasil (el mercado consumidor de drogas más grande de Sudamérica) es un área de tránsito crucial. El caudaloso río Amazonas es el punto de partida para transportar cocaína hasta ciudades portuarias a lo largo de la costa atlántica de Brasil. Desde allí, la droga se distribuye a mercados de Europa, África y Medio Oriente.
Un jefe del crimen colombiano afirma que las zonas fronterizas de la Amazonía de su país son un caldo de cultivo para las organizaciones criminales. «Es un centro de acopio, es un mercado persa, para que me entienda. Acá usted consigue desde un tiro de 38 [una pistola calibre .38] hasta un misil tierra-aire».
El futuro de la Amazonía está en juego mientras estos grupos blanquean sus ganancias a través de la especulación de tierras y actividades aparentemente legales como la ganadería, que destruye la selva amazónica y afecta a las comunidades indígenas y a la población que quedan atrapadas en ciclos crecientes de violencia.
En esta serie nos sumergimos en la dinámica del crimen de Amazon Underworld para explorar las consecuencias sociales, culturales y ambientales de las economías ilícitas que están dejando graves impactos en la región.
Nuestros reporteros han rastreado grupos armados, organizaciones criminales y economías ilícitas de las zonas fronterizas amazónicas en Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela, apostando por el periodismo colaborativo, a través de las fronteras, y utilizando métodos de investigación cualitativos y cuantitativos. Puedes explorar estos datos en el mapa que aparece a continuación.
Después de 15 meses de reportear en campo y analizar datos, utilizando imágenes satelitales y construyendo nuevas bases de datos, 37 periodistas de 11 países presentan Amazon Underworld, a través de estas ocho historias.
Amazon Underworld es una investigación conjunta de InfoAmazonia (Brasil), Armando.Info (Venezuela) y La Liga Contra el Silencio (Colombia). El trabajo se realiza en colaboración con la Red de Investigaciones de la Selva Tropical del Pulitzer Center y está financiado por la Open Society Foundation y la Oficina de Asuntos Exteriores y del Commonwealth del Reino Unido y por la International Union for Conservation of Nature (IUCN NL).